El esmalte antióxido es una pintura especialmente formulada para prevenir y detener el proceso de oxidación en superficies metálicas. Contiene componentes que actúan como barrera protectora, impidiendo que el oxígeno y la humedad entren en contacto directo con el metal, evitando así la corrosión.

Beneficios del esmalte antióxido

• Protección duradera: su fórmula avanzada proporciona una protección duradera contra la oxidación, asegurando una mayor vida útil de las superficies metálicas.
• Estética mejorada: además de su función protectora, el esmalte antióxido también ofrece un acabado estético, mejorando la apariencia de las superficies tratadas.
• Versatilidad: puede aplicarse en una variedad de superficies metálicas, desde barandas y rejas hasta muebles de exterior y estructuras metálicas.

Pasos para aplicar el esmalte antióxido

1. Preparación de la superficie: Limpieza exhaustiva para eliminar óxido, polvo y grasa. Utiliza una lija para metales en áreas oxidadas.
2. Aplicación de convertidor de óxido (si es necesario): En casos de corrosión avanzada, es recomendable aplicar un convertidor de óxido antes del esmalte antióxido.
3. Agitación del esmalte: Asegúrate de mezclar bien el esmalte antes de aplicarlo para obtener resultados uniformes.
4. Aplicación con rodillo para esmaltar o brocha universal: Utiliza un rodillo para áreas extensas y una brocha universal para detalles y esquinas.
5. Secado: Deja secar completamente antes de aplicar una segunda capa si es necesario.

Materiales en que se puede aplicar

El esmalte antióxido es adecuado para una variedad de metales, incluyendo hierro, acero, aluminio y galvanizado, brindando protección a diferentes sustratos metálicos.